Pasajeras

INT. AUTOBÚS - DÍA
La señora que está sentada en el autobús me da una grima horrible, está calva y lleva un feo abrigo de piel. Por supuesto, no me he puesto a gritarlo en medio del autobús. La señora ha querido que todos nos enteremos de su triste vida, resulta que cuando se hizo daño en un brazo le iba a atender un médico negro, “que vergüenza por dios!!!”, la señora ya no sabe en qué país vive “figúrese si ahora son todo negros, moros y chinos…”. La señora recuerda cuando iba a cuestas con sus hijos y tenían que pagar todos el autobús “ahora es vergonzoso, los sudamericanos se cuelan, ¡claro como son tan bajitos!” La señora de al lado de la señora, no dice nada, sólo asiente con la cabeza, pensando en que factores espacio temporales le condenaron a tal calvario.

INT.AUTOBÚS - NOCHE
Son las 3 de la mañana, y es el único asiento libre del búho. No vacilo, de inmediato me hago con él y disfruto del calorcito artificial. Suena el móvil de mi compañera desconocida y comienza una de las historias más emocionantes del día. Resulta que una de sus amigas, pongamos que se llama Ana, le tiene envidia, es una tía odiosa, nunca le parece nada bien y sólo quiere discutir. ¿Y todo esto por qué? “porque no folla, la tía todavía me echa en cara que me haya enrollado con Juanma, yo no tengo la culpa de ser más simpática que ella, joder tía si cuando viene un tío no le habla..., se queda ahí parada, pues tronca si eres fea cúrratelo…” la voz de mi amiga cada vez está más ronca y más exaltada. “Otra cosa igual, le molesta que quede con Luis, tía es mi ex novio y sólo hemos ido a pasear al perro, es una amargada… y te digo más el viernes que viene es su cumpleaños, le voy a regalar una colonia por respeto, pero vamos, si por mí fuera le envolvía un tarro de mierda”, Las risas de mi amiga retumban en el autobús. Yo disfruto del espectáculo pero no encuentro ninguna mirada cómplice para compartirlo…